El concejal de la minoría señaló que pasan por el Concejo cosas obvias como aceptar una donación, pero no se pide autorización ni se dan las explicaciones previas a una obra de 12.000.000 de pesos. “No respetar las ordenanzas preexistentes es propio de un país subdesarrollado” expresó.

“Si el ejecutivo habría presentado el proyecto original, seguro lo habríamos aprobado, nadie se opondría a la ejecución de una plaza” dijo Paoloni.

“Todos quedamos pintados, se hizo un gasto enorme y nos enteramos varios meses después. Hay veces que uno se siente un zonzo, porque se deciden cosas sin consultar; me siento ignorado, salteado, no debe pasar porque nosotros venimos gratis, perdemos tiempo y no merecemos que se nos trate así”

