Sostienen que personas de otras localidades obtienen el carné de conducir y hacen el cambio de domicilio, para luego ir a votar allá.
“En el pueblo hay 600 habitantes y 1.540 en el padrón”, denunciaron Elena Bertero y Eliana Lerín, las candidatas opositoras a la gestión que encabeza la intendenta actual, Carolina Jara.
Acusaron que la cantidad de electores habilitados para los próximos comicios casi triplica (o lo hace considerando el porcentaje de menores entre los reales residentes), lo que se daría a partir de quienes obtienen en el pueblo su licencia de conducir, por no estar el municipio adherido a la Ley Nacional de Tránsito. Además, denunciaron que “hay amenazas y presiones a los jóvenes y empleados que trabajan en la Municipalidad”.
En primera instancia expresaron que “se debe dar respuesta a este padrón elevado”, por lo que llevaron la denuncia a la Justicia Electoral Provincial y “hace un año venimos exigiendo la depuración”. Y como dato, señalaron que en 2017 había 900 votantes en el padrón.
Bertero y Lerín apuntaron que “según el padrón tendría que haber más de 600 personas viviendo en la zona rural, que es el domicilio que se declara cuando gente de otras localidades van al pueblo a obtener su licencia de conducir”. “Como tienen que declarar un domicilio, colocan zona rural… O se dan casos como el de la calle 24 de Junio, donde hay cuatro casas y tendrían domicilio casi 200 personas allí; también en las calles Cerafina Casas o Los Inmigrantes, pero lo más llamativo es cuando se declara en el carné de conducir la calle Independencia, que no existe en la localidad”.
“Realizamos un censo con la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE), para saber fehacientemente cuántas personas trabajan en el campo, y dimos con que solo 19 están afectados a tareas rurales, más allá de los radicados hace tiempo”, indicaron, aunque también reconocieron que algunos puesteros nunca hacen el cambio de domicilio.
Un dato no menor que añadieron es que el cambio de domicilio se realiza en el Registro Civil de la vecina localidad de Ballesteros.
Para Bertero y Lerín “este accionar posiciona a la localidad como una de las tantas que en la provincia acumula ciudadanos que llegan a votar a cambio de coimas, sin conocer además la realidad de quienes habitan este Ballesteros Sud, en este caso”.