El intendente municipal Mariano Calamante anunció el inicio de la obra del nuevo galpón que alojará al corralón municipal en un predio ubicado sobre la Ruta 6, hacia el sur, en la zona conocida como “el Matadero”. El proyecto contempla el traslado de todo el área de Servicios Públicos.
En declaraciones al noticiero “En Contacto”, Calamante explicó: “Es un proyecto que teníamos desde hace tiempo, incluso desde la gestión de Edwin. Todo el corralón y los trabajos que hoy se desarrollan en diferentes puntos de la localidad se trasladarán a este nuevo espacio, lo que nos permitirá desarrollar nuevos proyectos en los terrenos actuales”.
El nuevo galpón, que en esta primera etapa tendrá una superficie de 450 metros cuadrados, será la base de un plan más amplio. “La obra civil también contempla vestuarios y un espacio donde los empleados puedan dejar sus pertenencias. Esperamos que para fin de año podamos empezar a trasladar parte de los servicios y que a principios del año próximo ya tengamos algunos sectores funcionando en el nuevo predio”, indicó el jefe comunal.
Sobre la capacidad del nuevo galpón, Calamante fue claro: “La idea es seguir ampliando. No necesariamente con más galpones cerrados, pero sí con tinglados para resguardar las maquinarias y equipamiento como corresponde”.
La obra representa una inversión total estimada de 50 millones de pesos. La etapa en ejecución alcanza los 21 millones “Ya habíamos comprado parte del material durante la gestión anterior. Ahora estamos afrontando los costos de mano de obra y se sumará la obra civil”, detalló el intendente. Además, señaló que la construcción se adapta a una estructura existente en el predio: “Hay un galpón que en su momento queremos destinar a la fábrica de adoquines, que hoy está en pausa, y un lavadero para maquinaria. Todo esto se irá anexando a lo nuevo”.
Respecto al destino del actual predio del corralón, Calamante ratificó el objetivo de convertirlo en un espacio cultural y educativo: “Tenemos una promesa hecha a Bomberos Voluntarios para que utilicen un sector contiguo al cuartel, y el resto será destinado a cultura. Queremos conformar un polo cultural junto al Salón del Alpazuma, el espacio de la Banda, los talleres de cerámica y la Biblioteca. La idea es aprovechar las estructuras existentes y adaptarlas a estas nuevas funciones”.