El pasado sábado se celebró en el Santuario de la Virgen de las Mercedes de Saladillo, la ceremonia del Sacramento de la Confirmación, con la participación de alrededor de 90 niñas, niños, adolescentes, jóvenes y adultos de Monte Buey.

La misa fue presidida por el Obispo de la Diócesis de Villa María, Samuel Jofré, y concelebrada por el Padre Néstor Pucheta, cura párroco de Monte Buey.

Durante la celebración, el Padre Néstor destacó el significado profundo de este momento para los confirmados y sus familias. “Los tres sacramentos de iniciación cristiana son el bautismo, la comunión y la confirmación. Por eso les decía al final de la misa que esto no es para terminar, sino para empezar. Ahora son adultos, ahora son responsables de comenzar a vivir, y no lo hacen solos”, expresó.

El sacerdote también agradeció especialmente a los padrinos y madrinas, resaltando su rol de acompañamiento en la vida de fe. “Muchos reciben ese pedido con emoción, otros con esperanza, otros se preguntan si podrán ser buenos padrinos. Pero se trata de eso: de empezar a acompañar a sus ahijados en este camino, en una edad difícil, la de la preadolescencia, con los desafíos que hoy existen. El sacramento de la confirmación les da la oportunidad de formar una relación que los fortalece en la fe”, sostuvo.

La ceremonia fue vivida con profunda emoción por las familias, que colmaron el santuario y participaron activamente de la celebración.


