Este domingo, la localidad de Monte Buey volvió a ser escenario del tradicional encuentro de quienes portan el apellido Singolani, una celebración que ya se ha convertido en un clásico dentro del calendario familiar.
En esta edición participaron aproximadamente 120 personas, superando las expectativas de los organizadores. “Calculamos llegar a 100, pero hemos superado las 120. Estamos muy contentos por todo eso”, destacó Héctor Cingolani, uno de los impulsores del evento.
Si bien los costos de traslado hicieron que algunos grupos se redujeran en cantidad de asistentes, el encuentro contó con una notable diversidad de procedencias. “Donde venían 8, vinieron 4. Donde venían 6, vinieron 2. Pero igual se hicieron presentes desde distintos lugares: hubo gente del Chaco, de Capital Federal, de Rosario —que nunca había venido—, además de los pueblos que participan todos los años, detalló Héctor.
El encuentro no solo sirve para fortalecer vínculos, sino también para proyectar nuevas ediciones. “Esto nos estimula y nos da fuerza para seguir organizando. Gracias al merchandising que hemos armado, solventamos muchos gastos y ya estamos pensando en la próxima fiesta”, explicó.