La Liga de Fútbol Comercial (LIFUCO), que se disputa en Monte Buey, atraviesa un momento de incertidumbre luego de los incidentes ocurridos durante la última fecha del campeonato. El organizador del certamen, José Luis Fabiani, confirmó que el torneo se encuentra “en pausa” mientras se avanza con la investigación policial de los hechos.
“En el momento en que jugaban el partido de fútbol femenino, se produjo una situación muy dolorosa en mi condición de organizador. Es un proyecto que vengo trabajando desde hace tiempo, con mucho esfuerzo y con el apoyo de mi familia, y repudio enérgicamente la violencia, porque no es el camino para resolver los problemas”, expresó Fabiani en diálogo con el noticiero local.
El dirigente explicó que la suspensión es momentánea y que el objetivo es retomar la actividad una vez que se esclarezcan los hechos y “baje un poco la espuma”. “Queremos que este episodio quede como una marca oscura que pueda superarse, y que sólo sea un mal recuerdo”, manifestó.
Según detalló Fabiani, los incidentes ocurrieron durante el último partido del fútbol femenino, aunque los protagonistas no fueron las jugadoras, sino personas ajenas a los equipos. “Intenté persuadir a quienes querían agredir, pero fue en vano. Estaban muy alterados, y aunque hubiera habido más seguridad, probablemente no se hubiera podido evitar lo que pasó”
El organizador destacó el comportamiento del resto de los participantes y subrayó que “no todos tienen por qué pagar las consecuencias por un grupo de violentos”. “Hay equipos que han demostrado compromiso: el fin de semana pasado uno se presentó con seis jugadores para no romperme el campeonato. Esa gente no merece quedar afuera por culpa de otros”, afirmó.
La LIFUCO se encontraba a una fecha de finalizar la etapa clasificatoria, para luego ingresar en los cuartos de final. “No queremos que los violentos ganen la batalla; queremos que prevalezcan los que van, juegan y disfrutan del fútbol”, concluyó Fabiani.
