La Iglesia Pentecostal de Santidad de Monte Buey, que transita su cuarto año de actividad en la localidad, llevó adelante este fin de semana un gran evento al aire libre “puertas abiertas” de su habitual espacio, con una propuesta recreativa y gratuita destinada a las niñas, los niños y sus familias. La convocatoria superó las expectativas y reunió a una gran cantidad de vecinos en el Parque Municipal.

La jornada contó con la participación especial de la agrupación Contra Corriente, proveniente de Capital Federal. El grupo —cuyo centro espiritual se encuentra a pocos metros de Plaza Miserere, en el barrio porteño de Once— recorre el interior del país llevando actividades pensadas para difundir el mensaje de la iglesia y promover espacios de encuentro comunitario. Su presencia el sábado en Monte Buey fue muy bien recibida. El domingo estuvieron en Bell Ville

Durante toda la tarde, el parque se transformó en un circuito de juegos y propuestas lúdicas: maquillaje artístico, dibujo y pintura, rompecabezas, juegos con masa y plastilina, desafíos de memoria, puntería y destreza física. Cada participación sumaba pequeñas golosinas como premio, lo que hizo que los puestos se mantuvieran siempre colmados de chicos y chicas.

El evento también ofreció gratuitamente tortas, facturas, dulces, chocolatada y jugos, aportados por miembros de la congregación. Contra Corriente instaló además una pantalla LED de gran tamaño donde se proyectaron videos para acompañar la tarde.

La propuesta artística incluyó una obra teatral, números de saxo y la presentación de “Viper y sus amigos”, personajes muy conocidos por los más pequeños a través de las redes sociales, que desplegaron un show interactivo que capturó toda la atención del público infantil.

Para la Iglesia Pentecostal de Santidad, este evento representa un paso importante en su vínculo con la comunidad. Hasta ahora, sus actividades al aire libre habían sido más pequeñas, como las realizadas en Plaza Perón.

Esta vez, la apuesta mayor tuvo como objetivo principal ofrecer a los niños un espacio para dejar por un momento las pantallas, mirarse, compartir, reír y jugar al aire libre, recuperando la esencia de las infancias tradicionales.

