La Dra. Luisina Paoloni es la primera mujer médica de especialidad cardióloga nacida en Monte Buey.
Fue entrevistada en el programa Entretenidos por Vivencias TV comentando el porqué de su elección de la carrera y luego la especialidad cardiológica, cuánto influyó su papá (Oscar Paoloni, reconocido Cardiólogo de Monte Buey), como fue el cursado, la residencia y el ejercicio de la medicina en una gran ciudad y luego en su pueblo natal.
Luisina estudió medicina en la Universidad Nacional de Rosario obteniendo el título en el 2016. Luego tuvo una formación denominada “medicato”, una rotación ejerciendo como médica de guardia en un centro de salud bajo la supervisión de varios jefes. Posteriormente y durante 4 años realizó la residencia en Cardiología general en el sanatorio Británico de Rosario, parte de ella bajo la pandemia de Covid. Tiene en proyecto especializarse en imágenes cardiológicas como ecografías y eco doppler.
Desde octubre del año 2024 ejerce profesionalmente en el Hospital Italiano de Monte Buey, su lugar natal, algo que siempre deseó: “mis compañeros siempre me decían que los viernes tenía una sonrisa enorme y era porque me volvía al pueblo; siempre me costó la ciudad, nunca me adapté, no hice un grupo en la facu con gente de Rosario, eran todos de pueblos y se volvían los fines de semana. El que conoce la vida de pueblo se queda, no hay mejor lugar que Monte Buey”.
La profesional indicó que su papá estuvo siempre a su lado, “el formaba parte de mis estudios, siempre fue un excelente profesor con la facilidad de hacer simple lo complejo; me ayudó en cosas difíciles como física, química y más complejas en cardiología, fue un estudiante más conmigo.
La Dra Paoloni remarcó los contrastes en el ejercicio de la medicina en una gran ciudad y una pequeña localidad, destacando el trato más humano y personalizado en Monte Buey. “Cuando empecé la especialidad me desilucioné mucho de la medicina porque faltaba humanidad en la gran ciudad, quizás por el desgaste y la exigencia diaria de un médico, con mucha carga horaria, y porque en una ciudad deja de ser personalizado y una atención a alguien conocido; me generó un conflicto pero después pasó; en Monte Buey es totalmente diferente, con mucha más humanidad y empatía, pero con una responsabilidad social mayor que en la ciudad” explicó.
Explicó que se considera una profesional “muy sensible” y al comienzo le costó acostumbrarse con la llegada de los primeros pacientes, argumentando que con el tiempo se va formando una coraza para no sufrir y no llevarse a casa el trabajo y las afecciones. “Me moviliza e impacta un poco más la gente joven con una afección cardíaca o que llega con un infarto, sin tener antecedentes o una edad de deterioro”.
Destacó el trabajo en el Hospital Italiano “Se trabaja un montón y muy bien; acá hay un equipo increíble y cuando uno necesita del otro están todos presentes y eso no pasa mucho en la ciudad”.
Cómo es trabajar con su papá, reconocido cardiólogo del Hospital Italiano
“Estoy encantada, nos llevamos muy bien, es un jefe excelente, compartimos consultorio, conicidmos en un montón de cosas y cuando nó lo charlamos y lo reevaluamos, me ayuda mucho”.